sábado, 26 de octubre de 2013

J.A Sanz 200m, 6a+ (V obl.) Bautizo en riglos

Tras salir de Pamplona poco convencido por la escalada que íbamos a hacer en riglos y hacer una parada "técnica" en la carretera a Fago para soltar lastre, llegamos al pueblo de Riglos y mis dudas no se resolvieron. Empezamos a andar hacia el Mallo Frechín. Nuestro objetivo, la J.A. Sanz a petición mía. Mikel Quería hacer el Puro, pero le dije que mejor lo dejáramos para otro día.

Llegamos a pie de vía y la vista de la vía no es que me tranquilizara mucho. Eso picaba demasiado para arriba. Pero en fin, ya que estamos... subiremos hasta donde podamos.

Croquis de la vía

L1 (6a, 40m): Empieza en una repisa al lado de un árbol. Este primer largo no tiene mayores problemas, salvo un paso a 10 metros de la reunión, que hay que apretar un poco. Por lo demás, una sucesión de bolos y panzas, la tónica general de estos mallos. Sin más problemas, llegamos a la R1 con la cuerda muy muy rizada. De sobra es sabido que a Mikel le gusta montar reuniones sobre un parabolt, pero en esta ocasión, para la tranquilidad de un servidor, la reforzó en un anclaje viejo y roñoso. Es mejor seguir unos 15m más arriba y montarla en condiciones, sobre anillas.

La pared vista desde abajo

La Visera

Llegando a la primera reunión

Así es, la cuerda estaba bastante rizada

L2 (6a+, 40m): Sale Mikel de la reunión en busca de otra más fiable. Resuelve los pasos sin problemas y llega a la segunda reunión (tercera si no se salta ninguna). El largo tiene un paso al final, que se trata de una panza, como no. El problema que tuve en casi toda la vía fue que no sabía muy bien como entrar a las panzas y me cansaba más de la cuenta. Lo mejor es que mis miedos se fueron perdiendo poco a poco mientras escalaba. Esta reunión ya era más fiable.

Segundo largo desde arriba

Apretando más de la cuenta 
En la segunda reunión


L3 (6a, 30m): Paso al inicio del largo y luego se va encaramando a un diedro bastante chulo. La llegada a la reunión es la que puede impresionar más pero el truco esta en seguir por el diedro hasta llegar a la par de la reunión y luego hacer una travesía hasta ella. Es la más aérea de todas.

En el diedro antes de llegar a la reunión
Mikel en la tercera reunión

¡All together!

L4 (V+/6a, 30m): No se si será que era mi primer largo en Riglos de primero, pero me pareció un largo duro. Según he dicho antes, mi mayor problema fue la colocación antes de las panzas. No supe colocarme bien desde un principio y por lo tanto, las resolvía de mala manera. Al final llego a la reunión sobre una terraza (ya ni repisa). Mikel, por cierto, lo sube silbando.

A por el cuarto largo

El trono 

Gente en la Visera haciéndole una fiesta a sus "biceps"

Mikel acabando el largo

L5 (6a+, 50m): Empalmamos los dos últimos largos y ya salimos por arriba. Se sale de la terraza por las chapas de la derecha en busca de una panza, que es precisamente donde está el paso. Se trata de una panza donde colocarse bien es la clave. Es un tramo un poco desplomado, aunque en comparación con nuestra vecina, La Visera, esto es una campa de hierba. Tras este paso, la vía se suaviza bastante y baja de grado considerablemente hasta llegar arriba. ¡Prueba superada!

En el último largo

Fin de vía!!

En la cima del Mallo Frechín


Descenso: Seguimos hasta la cima de la Visera y bajamos hacia la izquierda, por un camino bastante marcado, en busca del circo entre el Pisón y el Mallo Firé. El camino nos lo indicaron Asier y Borja, dos chicos que estaban haciendo a la par que nosotros la vía Irene y la Paz y que amablemente nos hicieron fotos de la ascensión.

Un día para repetirlo, aunque a Mikel le supo a poco. Hay que tener en cuenta que para Mikel todo lo que baje de 6b no es divertido.